21 junio 2011

SERVIDUMBRE VOLUNTARIA

(Valencia 9 de mayo 2011)

Etienne de la Boétie ya vio hace quinientos, desde Sarlat, una explicación a la sumisión de muchas poblaciones, casi esclavizadas, a los poderes establecidos. No estaba en el miedo a la violencia, al castigo, es una consecuencia de lo que vino en llamar "servidumbre voluntaria".

Según Z. Bauman "la sumisión se debe a una íntima inclinación humana al orden (incluso al precio de severas restricciones de la libertad) que pesa más que la inclinación a la libertad, pues ese orden sustituye la contingencia y la incertidumbre por una forma de paz y consuelo espiritual que solo puede ofrecer la rutina administrada por el poder".

Esto podría ser una explicación del auge de los partidos de derecha y derecha extrema, partidos que además, para dejarlo bien claro, nada más tomar posesión de su cargo acuden alegres a la Iglesia (máximo exponente del poder divino) a dar las gracias: el votante asocia poder + religión = orden.

18 junio 2011

TIEMPOS RECIOS, 15M

(Rodeando el Ayuntamiento de Valencia, 21 de mayo 2011)
Tiempos duros y difíciles se viven para la llamada "progresía", cuando mueren las ideologías, se liquidan las utopías y fracasa la Ilustración moral. ¿Qué queda para la izquierda? Los movimientos urbanos del 15M son tal vez una oportunidad para definir una visión más social y solidaria alejada de las luchas partidistas que pagamos en los Presupuestos del Estado.

Dice Adela Cortina, profesora de la Universidad de Valencia, en su libro Ética sin moral (Tecnos, 1990):
A mi modo de ver, por tanto, una ética política que hace justicia a la realidad social es la que colabora en la formación de hombres autónomos y solidarios, tan alejados de un colectivismo homogeneizador como un individualismo sin señas humanas de identidad. Abandonar el colectivismo por inhumano es opción bien saludable, pero para ello no es menester apostar por un individualismo que tampoco da cuenta de lo que los hombres son. Tal vez quien entienda el socialismo en la línea de Habermas, "como forma de vida que posibilita la autonomía y la autorrealización en solidaridad", debería optar más bien por atender al carácter personal -autónomo-de los hombres y a la solidaridad que constituye su elemento vital.