Deliciarum Hortus ( El Jardín de las Delicias) es un manuscrito medieval elaborado por Herrada de Landsbergen en la Abadía de Hohenburg de Alsacia, conocida hoy como La montaña Sainte-Odile. Era una enciclopedia con bellas ilustraciones., iniciada en 1167 como una herramienta pedagógica para jóvenes novicias/os en el convento. Es la primera enciclopedia escrita por una mujer. Fue terminada en 1185, y fue uno de los manuscritos iluminados más célebre de la época. La mayoría de la obra está en latín y comentarios en alemán.
Gran parte del manuscrito no era original, fue un compendio de los conocimientos del siglo XII. El manuscrito contenía poemas, ilustraciones y música, y textos de escritores clásicos árabes entremezclados con los escritos de otras fuentes, entre ellos los poemas de la autora del manuscrito la religiosa Herrada, dirigida a las monjas , casi todos los cuales fueron escritos para ser acompañados de música. La parte más famosa del manuscrito es la ilustración, nº 336 que simboliza varios temas, incluyendo, filosofía y literatura y temas teosóficos. Esta obra tiene un gran valor artístico y desafortunadamente el manuscrito se perdió cuando se quemo, que estaba guardado en una mansión dentro de una colección privada de Estrasburgo, y que por causa de un bombardeo ardió la casa y lo que ella contenía,
Fue posible reconstruir partes del manuscrito, uniendo las parte que habían sido copiadas por varias fuentes, entre ellos Christian Maurice Engelhardt copiador de miniaturas en 1818, los textos copiados fueron publicados por Straub y Keller entre 1879 y 1899.
Deliciarum Hortus es una de las primeras fuentes de la polifonía procedentes de un convento. El manuscrito contiene los textos por lo menos 20 canciones, todas las cuales fueron anotadas inicialmente con música. Aquellos que se pueden reconocer ahora son de la conductus repertorio, y son principalmente nota contra nota en la textura. La notación fue en semi-cuadrática neumas con pares de cuatro líneas de los pentagramas. Contiene canciones con música que se conservan intactos: hominum parens Primus, una canción monofónica , y una obra de la segunda parte, occasus oritur Sol.
Herrada, nació hacia el 1130 en la región del Bajo Rhin, en el castillo de Landsberg. Pertenecía a una familia noble alsaciana y tomó los hábitos cuando era muy joven, en la abadía de Hohenburg, en los montes Vosgos, cerca de Estrasburgo. Los monasterios eran lugares donde las mujeres de la Edad Media, podían acceder a conocimientos importantes sobre diversos temas. Es así que Herrada hacia el año 1165, comenzó entre los muros de su convento a escribir e ilustrar un compendio de todas las ciencias estudiadas en su época, incluyendo la teología.
En 1167 se convirtió en abadesa y conservó su posición hasta su muerte en 1195. Como responsable de la abadía de Santa Odilia, en Alsacia, compuso esta enciclopedia, que destinó a las jóvenes monjas y novicias de su congregación para su crecimiento en la vida de la fe y del amor por toda la eternidad. Con sus dotes espirituales e intelectuales, hizo una elección de textos de grandes teólogos de la época y las miniaturas eran ilustraciones que explicaban esos textos.
El Hortus, admirable obra de arte de la miniatura, representa la síntesis de su magisterio como madre espiritual. El Hortus Deliciarum estuvo durante siglos en la abadía de Hohenburg y durante la Revolución Francesa, pasó a la biblioteca municipal de Estrasburgo.
La técnica de algunas ilustraciones ha sido muy apreciada en casi todos los ámbitos artísticos, ya que demuestra una imaginación muy extraña entre los artistas contemporáneos de Herrada. La poesía que acompaña a los extractos de escritores de la antigüedad y de autores paganos también ha contribuido a la fama de Herrada.
La obra tiene defectos habituales en las obras literarias del siglo XII: faltas de ortografía, palabras y construcciones no utilizadas en la gramática clásica y giros estilísticos en varias frases que no serían aceptados en una escuela de poesía latina de su época. Sin embargo, su sentimiento es sincero, las líneas poéticas son musicales y admirablemente adaptadas a su propósito, el servicio a la divinidad. Herrada considera que su comunidad es una congregación unida para servir a Dios cantando alabanzas en su nombre.
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